Reseña | El Jardín Olvidado - Kate Morton

¡Primera reseña del año!

¡Hola personitas! ¿Cómo han estado? El 2017 ha quedado atrás, sin embargo, cada recuerdito que nos dejó seguirá presente en nosotros. En este año uno de mis propósitos es que disfruten su estancia aquí en el blog, darles confortabilidad a través de las entradas. Ahora sin más, esforcémonos durante el año.

💬Título: El jardín olvidado
💬Autor/a: Kate Morton
💬Género: Ficción histórica, drama
💬Editorial: Debolsillo
💬Saga: Autoconclusivo
💬ISBN: 9786073140072

Sinopsis

Una niña abandonada en un embarcadero un año antes de que estalle la Primera Guerra Mundial; la revelación a una joven del secreto sobre su verdadera ascendencia; la herencia de una espléndida y misteriosa finca en la costa salvaje de Cornualles... Estos son los puntos de partida de una historia inolvidable que evoca la gran novela victoriana, los cuentos de hadas y los relatos de intriga.

¡Okay! Kate Morton es mi escritora favorita y El jardín olvidado es su novela más popular, por lo que no podía dejar la oportunidad de leerlo. El libro fue un regalo de Navidad 2016, sin embargo, durante todo 2017 no me animaba a leerlo porque los libros Debolsillo suelen lastimarme la vista, así que lo dejé en el librero por varios meses. Ya en diciembre 2017 decidí dejarme de juegos y por fin lo leí. La verdad, fue un lujo de lectura.

Antes de hablarles de la historia, me gustaría comentarles que la narración se ubica en distintos tiempos, destacando 2005, 1975 e inicios del siglo XX. Por ende, nos encontramos con tres distintas protagonistas. 

Pasando a la historia. En 1913 llega a Australia una embarcación inglesa. Ahí aparece una niña de cuatro años con una meletita que no recuerda nada, por lo que un lugareño decide adoptarla, nombrándola Nell. Debido a su edad, Nell olvida que es adoptada y al cumplir 21 años, su "padre" decide contarle la verdad.

El sentirse ajena a su familia, lleva a Nell a aislarse. En 1975, al morir su "padre", inicia una búsqueda de identificación con la intención de dar con sus raíces. La investigación la lleva en secreto y en 2005, al morir, le deja a su nieta, Cassandra, una herencia muy sospechosa: una cabaña en un acantilado en Cornualles, Inglaterra.

Nell jamás pudo resolver su enigma familiar, por lo que Cassandra sabe que su deber es descifrarlo de una vez por todas. Acompañada de la maletita que traía su abuela al llegar a Australia, viaja a Inglaterra en busca de respuestas.

¿Era siempre así? Los que tienen billete para el silencioso barco de la muerte ¿miran siempre al muelle en busca de los rostros de los que ya han partido?

Así es como iniciamos el recorrido de nuesta lectura, sin embargo, al ir encontrándonos con más datos, comienzan a surgir personajes claves para comprender el pasado de Nell. Es aquí donde el hilo de la historia nos transporta a inicios del siglo XX. 

En 2005 Cassandra intentará encontrar el pasado de Nell. En 1975 Nell buscará huellas de sus raíces familiares. Y, a principios del siglo XX, antes del nacimiento de Nell, nuestra última protagonista se protege del cruel Hombre Malvado del que su madre le habló.

Cada capítulo está encabezado con el año y sitio en el que se desarrolla la historia. Quizá pensarán que el hecho en que la historia se base en distintos ambientes desconcorde la historia, sin embargo, no es así. Otro detalle del libro son los cuentos que nos encontraremos al avanzar la historia. Cuentos escritos por cierto personaje del libro y si prestamos atención, podremos comprender de mejor forma a la personita detrás de ellos.

Un punto muy admirable de la novela es que, a pesar de la gran cantidad de escenarios y personajes, Kate Morton los presenta de una manera entendible, nada tediosa. Nos muestra varias historias secundarias ingeribles, que a mí, me terminaron encantando.

¿Qué princesa de cuentos de hadas elige a su doncella en vez de al príncipe?

Debo admitir que yo estaba flipando con los capítulos desarrollados a principios del siglo XX, en primera por las situaciones que se desarrollan y en segunda, la protagonista hace un clic con el lector que nos hace querer saber más y más de lo que vivió. Mientras tanto, casi al acabar el libro, me costaba tolerar los capítulos del 2005 porque Cassandra, nuestra guía, me resultaba aburrida, su desarrollo algo atropeyado, aunque admito, que los descubrimientos que ella hacía eran sorprendentes. Y con los capítulos de 1975 no tuve ningún problema, pues se desarrollan armónicamente. 

El aspecto que más me gustó de El jardín olvidado es que la historia gira alrededor de los lazos familiares. El deseo de querer conocer las raíces, de dónde se procede. El entender que en cada familia existe un secreto, sólo que en algunas es más grande que en otras. Me hizo reflexionar sobre mi árbol genealógico, de cuánto conozco de las generaciones que vinieron antes de mí y de aquellos secretos que jamás descubriré.

Una novela que va más allá de descubrir el pasado de Nell. Una suave combinación de la Inglaterra victoriana y el mundo contemporáneo donde los lazos familiares se dignan a sobrevivir a pesar del tiempo.

PUNTUACIÓN

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Sobre la autora

Kate Morton creció en las montañas del sudeste en Queensland. Posee títulos en arte dramático y literatura inglesa y es candidata doctoral en la Universidad de Queensland. Kate vive con su esposo e hijos en Brisbane. La casa de Riverton, que fue su primera novela, se publicó con enorme éxito en 34 países, alcanzó el número uno en muchos de ellos y lleva vendidos más de 1,6 millones de ejemplares en todo el mundo. El jardín olvidado fue su segunda novela y ha vendido hasta la fecha más de 2,5 millones de ejemplares. Se estima que las ventas globales de toda la obra de Kate Morton ascienden a más de 7 millones de ejemplares.

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